Veamos en un ligero paseo por la ciudad de Praga cuales vienen a ser justamente los lugares que más vale la pena poder visitar en cualquier momento del año.
Empecemos nuestro recorrido en un famoso edificio deconstructivista, diseñado por los arquitectos de Frank Gehry y Vlado Milunic. Nos referimos a la Casa Danzante de Praga. Se trata ni más ni menos que de una de las construcciones urbanas más inusuales de toda Europa, ubicándose en un espacio lleno de edificios clásicos y contrastando de ellos debido a poseer una asimetría tal que hace que para muchos sea comparable con un par de bailarines en movimiento. Vale la pena mencionar que la casa fue edificada en el año 966.
No te puedes olvidar de visitar al que viene a ser el reloj más antiguo de tipo astronómico de toda Europa, conocido como Orloj, un reloj medieval, el cual data aproximadamente del año 1410. Lo más curioso es esperar el momento en que cambian las horas, pasando a aparecer unas figuras que vienen a representar a los doce apóstoles y demás personajes de similar carácter religioso, habiendo también un curioso esqueleto entre todos ellos que llega a indicar la muerte, la cual en cualquier momento puede llegar. El edificio en que se ubica también resalta en bella arquitectónica renacentista.
Uno de los símbolos de la ciudad es sin duda el Castillo de Praga, el cual fue edificado en el siglo IX. Se trata de una fortificación medieval de 570 metros de largo y 130 de ancho. En su interior encontramos una serie de monumentos arquitectónicos importantes como la Catedral de San Vito, el Callejón del Oro y la Alquimia, la Torre de la Pólvora, la Capilla de la Santa Cruz, entre otros
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